Padre de las menores embera presuntamente abusadas en Bogotá habla: «Solo les dieron acetaminofén para el dolor»

Un día después de que la Alcaldía de Bogotá informara sobre cuatro casos de presunto abuso sexual a menores de edad indígenas en la UPI La Florida y el Parque Nacional, el padre de una de las menores entregó detalles de los momentos de angustia por los que pasaron sus hijas y su familia.

Detalles de los casos de abuso sexual

  • Se reportaron cuatro casos de abuso sexual a menores indígenas en Bogotá
  • Uno de los incidentes involucró a dos niñas de 13 y 11 años, hijas de un líder comunitario embera

Según el relato del padre de las menores, el incidente ocurrió entre los días 27 y 30 de junio de 2024, cuando las niñas estaban en Corabastos acompañadas por otras mujeres embera tratando de conseguir alimento para su comunidad.

Detalles del abuso

  • Una de las mujeres pagó a un motociclista para que llevara a las niñas a una estación de Transmilenio
  • El motociclista las trasladó a otro lugar, donde las amenazó con un cuchillo y las tocó
  • Luego de escapar, las niñas fueron encontradas en un hospital con golpes y rasguños en el cuerpo

El padre de las menores criticó la falta de atención médica adecuada en el hospital, donde solo les dieron acetaminofén para el dolor. Asimismo, denunció que tuvo que esperar más de dos días para poder presentar la denuncia correspondiente debido a la falta de atención durante los festivos en las URI de la ciudad.

Respuesta de las autoridades

  • La Policía Metropolitana de Bogotá ha detenido a uno de los presuntos agresores
  • El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar ha activado la ruta de atención para las menores afectadas
  • Se ha designado un equipo profesional para verificar los derechos de las niñas y ubicarlas en un hogar sustituto

Las autoridades han instado a la comunidad a denunciar cualquier situación que ponga en peligro la vida o integridad de niños, niñas y adolescentes a través de la línea 141. La preocupación por la vulnerabilidad de las comunidades indígenas en Bogotá sigue latente, mientras se continúan las investigaciones para dar apoyo a las víctimas y sus familias.

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