La inflación de EEUU llegó a su valor más bajo en dos años
El alza de precios ya se redujo más de la mitad respecto de su pico de junio del año pasado cuando llegó al 9,1%, un récord desde principios de la década de los 80.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) en Estados Unidos encadenó su undécima baja consecutiva en mayo y registró una tasa interanual del 4%, nueve décimas menos que el mes anterior y la cifra más baja desde marzo de 2021, anunció la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS) dependiente del Departamento del Trabajo.
Esta nueva moderación le daría a la Reserva Federal (FED) un último reaseguro para que se decante por una pausa -la primera desde marzo del año pasado- en su ajuste de tasas, decisión que comunicará el miércoles al finalizar su reunión monetaria.
Con el dato de mayo, la inflación ya se redujo más de la mitad respecto de su pico de junio del año pasado cuando llegó al 9,1%, un récord desde principios de la década de los 80.
El índice general mensual, mostró sólo 0,1%, mientras que el índice núcleo –que excluye los valores volátiles de la energía y los alimentos- se ubicó en 5,3% anual (-0,3 pp. respecto de marzo) y 0,4% mensual (sin cambios).
Si bien este último dato sigue alto (en gran medida, debido a la suba del costo de alquileres y viviendas), ya se ubica 1,3 puntos por debajo del récord de 6,6% anual de septiembre pasado.
Tanto en el dato general como en el núcleo, las cifras coinciden con las anticipadas por los economistas, señala la agencia Bloomberg.
Entre los diversos componentes, la energía presentó una baja de 11,7% anual y los alimentos subieron 6,7%; mientras que los servicios presentaron un alza de 6,6%, con especial incidencia de los valores de los alquileres que ascendieron 8% anual y 0,6% mensual.
También subieron los autos y camiones usados, seguros de automotores, cuidado personal e indumentaria; mientras que bajaron los muebles de hogar y pasajes de avión.
En una publicación separada, el Departamento del Trabajo informó que los salarios reales subieron 0,2%, ubicándose en terreno positivo por primera vez en los últimos dos años.
La cifra del IPC de este martes es el último insumo que tendrá la FED para decidir su próximo movimiento en lo que respecta a la tasa de interés, la cual actualmente se encuentra en un rango de entre 5% y 5,25%, el mayor desde 2007
Desde marzo del año pasado, la FED ajustó diez veces al alza las tasas con el objetivo de frenar la inflación.
Los responsables de la entidad monetaria comenzaron este martes su reunión, la cual finalizará el miércoles; y el mercado apuesta a que pausarán las subas mientras aguardan por más datos de la evolución de la economía.
Esta posibilidad la ratificaron diversos funcionarios de la entidad quienes, no obstante, aclararon que existe la posibilidad de retomar las subas de tasas, si es necesario, en las próximas reuniones.
En ese sentido, los economistas apuntan que, en el peor de los casos, habrá un sólo aumento más de tasas en julio, para luego retomar la pausa hasta entrado 2024, momento en el cual se esperan los primeros recortes.
Si bien la economía estadounidense sigue gozando de un mercado laboral sólidos y tasas de desempleo históricamente bajas -motivo de preocupación de la FED por sus efectos inflacionarios-; el crecimiento se encuentra prácticamente estancado (la economía sólo creció 0,3% trimestral en los primeros tres meses del año), y la inflación sigue en baja, pese a duplicar aún la meta de la FED del 2% anual.
Por otro lado, el índice núcleo -que sigue persistentemente alto- continuaría en baja en los próximos meses, de la mano de una menor inflación en autos usados y alquileres, indicaron economistas de Goldman Sachs en una nota publicada el lunes.
El presidente de la FED, Jerome Powell, afirmó el mes pasado que el organismo aún “tiene incertidumbre” sobre los efectos de sus subas de tasas pues las mismas tienen un cierto retardo para llegar a la economía real.