Jezzabelle Carranza, una historia única de lucha y amor por el fútbol
La jugadora de la ciudad rionegrina de Viedma, de 43 años, dejó todo por ser profesional y la dirigencia del fútbol le dio la posibilidad. Deportivo Español le abrió las puertas para capitalizar ese deseo que se cristalizó: «Quiero ganarme un lugar para estar en la cancha compitiendo», indicó.
Fuente: Télam