Lino Patalano celebra los 50 años del café concert junto a Peloni en el Maipo #Pelonintensivo
LINO PATALANO FESTEJA LOS 50 AÑOS DEL GÉNERO DEL «CAFE CONCERT» EN LA ARGENTINA EN EL TEATRO MAIPO CON EL ESTRENO DE «PELONINTENSIVO», EL PRIMER UNIPERSONAL DE ROBERTO PELONI GANADOR DEL HUGO DE ORO Y PROTAGONISTA DE LOS GRANDES MUSICALES DE LOS ÚLTIMOS 5 AÑOS QUE LO HICIERON MERECEDOR DE GRANDES ELOGIOS DE LA PRENSA ESPECIALIZADA.
Lino Patalano a 50 años del comienzo del genero del café concert en la Argentina decidió homenajearlo produciendo y estrenando el próximo viernes 11 de Agosto a las 23 horas en el ámbito del «Maipo Kabaret» el unipersonal «Pelonintensivo» con Roberto Peloni, ganador del premio «Hugo de Oro 2015» y protagonista de los últimos grandes sucesos del musical, como absoluto protagonista.
Cuenta la leyenda que allá por mediados de 1966 en una suerte de «casa-conventillo» a metros de la Avenida del Libertador nacía un espectáculo que marcaría un antes y un después en la historia de un genero teatral llamado «cafe concert».
Por esos días nacía «Help Valentino» protagonizado por Antonio Gasalla, Carlos Perciavalle, Edda Diaz y Nora Blai; y dio comienzo a una leyenda que a mediados de 1967 se inmortalizó llegando a ser portada de los diarios y revistas de la época por el fenómeno social ya que intelectuales, aristócratas y hasta políticos se peleaban por conseguir entradas para ver en esa suerte de conventillo a cuatro artistas en un espectáculo que diera vida a un mito teatral.
El nuevo espectáculo de Roberto Peloni que será «políticamente incorrecto», seguramente generarará polémicas gracias al ácido humor que despliegan los cinco personajes que recreará sobre el escenario. Este espectáculo, que une por primera vez a Lino Patalano y Roberto Peloni como dupla de empresario-productor y artista, se llevará a cabo todos los días viernes y sábados a las 23 horas en el Maipo Kabaret desde el próximo viernes 11 de Agosto.
El café concert revolucionó el humor y la música en la Argentina.
Según cuenta un cronista de la época, grupos de personas que no se conocían entre si pagaban una entrada carísima para congregarse en alguno de esos ámbitos reducidos , instalados generalmente en sótanos de sospechosa habilitación y en los que no cabían con suerte más de 100 personas, compartiendo mesas y sillas frente a un pequeño e improvisado escenario, dispuestos a degustar –según el caso- de una copa del mejor champagne o un vaso del más dudoso jugo de bidón, mientras asistían a una suerte de mágico ritual en el que tanto ignotos actores que no accedían aún al teatro comercial o famosas figuras ya consagradas por el público y la crítica, ponían en escena espectáculos que ningún productor de la calle Corrientes se hubiese animado a llevar a cabo y en los que ellos hacían y decían lo que se les venía en ganas.
El café concert se animaba a decir lo que nadie era capaz de expresar sobre un escenario, un set de televisión o la pantalla del cine.
Fue en esa época en la que siguiendo el camino iniciado por “Help Valentino”, “La Fusa” y “La Botica del Ángel” de Bergara Leuman, Lino Patalano y un grupo de jóvenes asociados crean esos ámbitos únicos que se convirtieran en leyenda años más tarde: «El gallo cojo» , «La gallina embarazada» y “El Pollito erótico” cuyos escenarios sirvieron de trampolín para que Edda Díaz, Antonio Gasalla , Carlos Perciavalle y Enrique Pinti lanzaran sus primeros y afilados dardos a una sociedad que escuchaba en esos recintos lo que no se decía en ninguna parte, o en los que estrellas como Niní Marshall, Cipe Lincovsky, María Rosa Gallo, María Vaner, María Luisa Robledo ó Marilina Ross se atrevían con apuestas que iban mucho más allá del mero entretenimiento, ofreciendo además una crítica feroz a la censura, los gobiernos de facto o simplemente a la pacatería de una sociedad que igual los festejaba y aplaudía a rabiar.
Muchos de ellos pasaron inmediatamente de esos pequeños escenarios a enormes ámbitos como el caso de Edda Díaz que terminó llenando con “Orgulloamente Humnilde” el viejo teatro El Nacional de 900 butacas, Cipe Lincovsky con “Yo quiero decir algo” reventó funciones en el Gran Rex, Carlos Perciavalle desbordando las taquillas del Grand Splendid con “Uno a querer”, Antonio Gasalla llenaba 14 funciones por semana en históricas temporadas en el Maipo, Enrique Pinti cocinaba la famosa “Salsa Criolla”que perdudaría por diez temporadas en el teatro Liceo y el caso más emblemático de todos, protagonizado por la super estrella Niní Marshal que estando casi al borde de su retiro y con más de 70 años, estrena a instancia de Patalano en El Gallo Cojo su unipersonal “Y se nos fue redepente” con el que realiza más de 1500 funciones.
Ya en otro período de la historia y luego de que los café concert desparecieran bajo “las botas” del gobierno militar y muchos de sus protagonistas tuviesen que exiliarse o dejar de trabajar durante los años de plomo, Lino Patalano continuó produciendo sin pausa hasta convertirse en 1994 en el dueño del Teatro Maipo.
Hoy a 50 años de aquel ayer tiene como fin con «Pelonintensivo» rendirle un tributo al género y lanzar como absoluto protagonista a Roberto Peloni que -como en su momento lo hiciera Cipe Lincovsky- «también quiere decir algo» en estos tiempos en que la Argentina y el mundo están en crisis y revolucionados.