Seis claves para iniciarse en el trabajo freelance
El trabajo freelance ha abierto un gran abanico de posibilidades, potenciando los beneficios y ofreciendo una oportunidad única para encontrar, no solo la libertad y autonomía que brinda este tipo de empleo, sino también una mayor estabilidad económica.
Los vaivenes actuales hacen que una gran cantidad de profesionales se vuelquen hacia plataformas en las que puedan conseguir buenos clientes y se conviertan en la mejor opción para ganar independencia, libertad y calidad de vida.
Trabajar desde donde quiera, con clientes de cualquier parte del mundo, flexibilidad de horarios, y trabajando de lo que nos gusta es el sueño de cualquiera. Sin embargo, al principio este camino no es fácil y se deben tener en cuenta algunas recomendaciones:
·Encontrar el área de actividad: Observar qué áreas o categorías de trabajo se ajustan mejor es el primer paso para iniciar la carrera de freelancer. Una vez resuelto este problema, se deben seguir las principales tendencias del mercado y llevar a cabo cursos de especialización.
·Diferenciarse de los competidores: Una buena manera de lograrlo es llevar a cabo una propuesta de trabajo que indique sus fortalezas y habilidades. Una buena propuesta, seguida de un proyecto llevado a cabo con éxito -según lo prometido- puede dar como resultado la fidelidad deseada con el cliente.
·Aprender a establecer un precio justo por el trabajo realizado: Uno de los mayores retos en los profesionales independientes es el de determinar cuánto cobrar por cada proyecto. Estipular un precio muy bajo puede menospreciar el trabajo y el esfuerzo, pero un precio elevado tampoco transmite nuestra identidad ni puede adaptarse a lo que se ofrece. Por lo tanto, se debe determinar un precio razonable que sea justo para ambos. En los inicios, es común ser un poco más flexible con los valores, ya que se prioriza ganar experiencia y ampliar la cartera de clientes.
A la hora de realizar el cálculo, es de suma importancia tener en cuenta los costos fijos personales y también de trabajo (como en los casos de los que trabajan desde coworkings), el tiempo que uno dedica al proyecto, y cuánto se necesita para vivir bien (¡y hasta darse gustos!)
·Establecer un horario de trabajo: La flexibilidad que ofrece el trabajo independiente es grande, pero es esencial determinar un período de trabajo, especialmente si se continuará con este modelo de trabajo. Se deben elegir los mejores tiempos para que pueda trabajar y deberá determinar cuáles son los momentos del día en que usted se encuentra más creativo o tranquilo para poner su cabeza de lleno en los proyectos. El cambio de modalidad que implica ser “nuestro propio jefe” y que la oficina sea, en el mayor de los casos, el mismo lugar en el que vivimos pueden desestabilizar la cotidianeidad que se solía tener. Se debe tener en cuenta que, en muchos casos, los horarios ya no serán similares a los del resto de las personas que trabajan en relación de dependencia, ni las jornadas de trabajo tendrán la misma duración.
·Emprender sin fronteras y al menor costos: Las oportunidades que se abren para los freelancers, están apoyadas en lo que las crisis generan para los emprendedores, que buscan nuevas oportunidades para encarar su negocio, reduciendo costos y armando equipos de trabajo remotos eficientes. La posibilidad de trabajar remotamente con seguridad ha abierto las fronteras para emprendedores y freelancers de forma extraordinaria en América Latina. En la actualidad, el freelancing se ha convertido en la mejor arma contra las crisis, las devaluaciones y las recesiones. Para muchos, ya no es necesario movilizarse para encontrar las oportunidades, ya que éstas se encuentran en el trabajo remoto.
·Mantener la comunicación, la clave de una relación laboral exitosa: La base de toda relación es la comunicación, sea de la manera que sea y especialmente en las relaciones laborales. Sobre todo, cuando el cliente y el profesional no se encuentran físicamente en el mismo lugar, este punto cobra un sentido aún más indispensable.
Sostener un contacto fluido es esencial en todos los estadios del proyecto, desde la negociación hasta el momento de la entrega del trabajo (e, incluso, hasta después de haber entregado para corroborar que el trabajo realizado esté acorde a lo pedido por el cliente).